.. | .. |
COMPORTAMIENTO DEL INFARTO AGUDO DEL MIOCARDIO EN EL MUNICIPIO PEDRO MARIA UREÑA. 07/2005 A 12/2006 |
. |
MATERIAL Y MÉTODO:
Se realizó un estudio de tipo prospectivo y descriptivo de serie de casos, donde la muestra estuvo constituida por los pacientes que ingresaron en la sala de cuidados intensivos del Centro de Diagnóstico Integral de este municipio, desde el 5 de julio del 2005 al 31 de diciembre del 2006, con criterios clínicos y electrocardiográficos de infarto agudo del miocardio, con previa aceptación voluntaria para participar en el estudio.
Se les tomaron muestras de sangre para determinar glucemia, colesterol, triglicéridos, y se determinó índice de masa corporal.
Para la recolección de la información se utilizó un formulario previamente elaborado, conteniendo preguntas sencillas que permitieran obtener información sobre datos generales y específicos sobre el infarto agudo del miocardio (ver anexo 1), que se aplicó a los pacientes o a sus familiares en caso de los fallecidos, además de apoyarnos en la información reflejada en las historias clínicas.
Una vez finalizado el período de recolección de la información, se llevó a cabo el procesamiento y análisis de la misma, los datos fueron procesados; las diferencias entre las variables categóricas se analizaron mediante la prueba de X2 de Person, y para las variables continuas se utilizó la prueba de t de Student, los contrastes se plantearon bilateralmente y se consideraron significativos los valores de p<0,05, posteriormente fueron reflejados en tablas y gráficos mediante el sistema EXCEL de Windows.
CONTROL SEMÁNTICO:
1) Índice de masa corporal (PESO KG/ TALLA M2): Según las cifras obtenidas los clasificamos en:
• < 20: delgado.
• entre 20 y 24,9: normopeso.
• entre 25 y 29,9: sobrepeso.
• con 30 y más: obeso.
2) Tabaquismo: Se consideró a los pacientes que fumaban de forma regular, más de un cigarrillo al día, como mínimo durante un año, o a los ex fumadores de menos de cinco años.
3) Antecedentes familiares de enfermedad coronaria: Se consideraron los que refirieron tener parientes de primer grado (padres o hermanos), con infarto agudo del miocardio o angina de pecho antes de los 45 años para los hombres y antes de los 55 años para las mujeres.
4) Sedentarismo: Fueron considerados así, los que refirieron no realizar ninguna tipo de ejercicio isotónico (caminar, trotar, montar bicicleta o practicar natación), de 30 a 45 minutos, al menos tres veces a la semana.
5) Localización del infarto agudo del miocardio: Área anatómica del infarto según los hallazgos electrocardiográficos: • postero-inferior (DII, DIII, AVF) • Antero-lateral (DI, AVL, V5, V6) • Antero-septal (V1, V2, V3) • Anterior-extenso (V1-V6, DI, AVL)
RESULTADOS Y DISCUSIÓN:
En el gráfico 1 se representa la distribución del IMA según la edad:
Como se puede observar: 11 pacientes (61,1%) pertenecían al grupo de edad de 65 años y más, seguidos del grupo de 55 a 64 años con el 27,8 %.
Al aplicar la prueba de comparación de k proporciones de grupos independientes se comprobó que el grupo de edad de 65 y más años tenía diferencias estadísticamente significativas con respecto a los otros grupos de edades de la muestra estudiada; la mayoría de los estudios coinciden con nuestros hallazgos con índices superiores al 40 %, en los grupos de mayor edad (37,38,39), como el RICVAL, el estudio de la ciudad de Matanzas con el 43%, y el PRIMVAC con el 56,3%; en 1060 casos de 35 unidades coronarias de centros médicos de Argentina entre noviembre de 1991 y agosto de 1994, predominaron los sujetos mayores de 65 años.
La edad constituye uno de los factores que hoy en día se le da real importancia teniendo en cuenta que durante la segunda mitad del siglo XX se comenzó a observar, fundamentalmente en países desarrollados un marcado envejecimiento de la población, a pesar de que en los últimos tiempos se ha observado un incremento del IMA en individuos jóvenes (12, 13).
En muchos países desarrollados y subdesarrollados como consecuencia del cambio demográfico, se incrementará en los próximos años la prevalencia de la población añosa, y a los problemas de adaptación por ese motivo, habrá que sumarle la elevada mortalidad y el costo de la discapacidad de las enfermedades no transmisibles, entre ellas las cardiovasculares, por consiguiente se justificaría la elaboración de estrategias que prevengan el desarrollo de la aterosclerosis y sus manifestaciones clínicas.
El riesgo absoluto para el desarrollo de la enfermedad cardiaca coronaria se incrementa con la edad tanto en hombres como en mujeres, justificado entre otras cosas por el mayor desarrollo de la enfermedad aterosclerótica en este grupo poblacional, En el gráfico 2 se refleja la distribución del IMA según sexo:
El 72% de nuestros casos eran hombres (11 pacientes). Al aplicar la prueba de comparación de k proporciones de grupos independientes, se constató que la frecuencia del sexo masculino fue estadísticamente significativa.
En la literatura a la que accedimos, la proporción de hombres siempre fue superior al 40%, llegando a más del 60% en el RICVAL y el estudio del hospital de Caldas. En los estudios publicados más importantes la incidencia de la enfermedad coronaria es más frecuente en los hombres (40), siendo la proporción con respecto a las mujeres de 2:1 o más.
A los hombres se les diagnostica más temprano y con más frecuencia que las mujeres esta entidad y tienen diez veces más riesgo que las mujeres; a su vez las mujeres posmenopáusicas tienen el mismo riesgo de morir por problemas cardiovasculares que los hombres diez años menores que ellas.
En el gráfico 3 se reflejan los factores de riesgo encontrados en estos pacientes
Como se puede observar hay una alta incidencia de muchos de ellos. Al aplicar la prueba de comparación de k proporciones se constató que el sedentarismo, la HTA y el tabaquismo fueron los factores de riesgo con mayor incidencia en nuestro estudio, y que resultaron estadísticamente significativos.
El estudio INTERHEART plantea que la hipertensión arterial, las dislipidemias, el hábito de fumar, la diabetes mellitus, la obesidad y el sedentarismo, son los factores responsables del 90% de las patologías vasculares(41). En Argentina se ha realizado un número considerable de estudios vinculados a la prevalencia de los factores de riesgo de la enfermedad cardiovascular; pero son pocos los estudios que analizan la asociación entre la cardiopatía isquémica y los factores de riesgo coronario, uno de ellos, con un diseño caso-control, incluyó 1000 pacientes con infarto agudo de miocardio (IAM) y 1000 controles, y fue realizado en 11 centros de la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires (42).
Analizó la mayor parte de los factores de riesgo coronario conocidos, pero se limitó a estudiar sólo a los menores de 65 años de edad y por limitaciones metodológicas no incluyó dentro de las variables estudiadas al colesterol plasmático. Otro estudio, también realizado en nuestro país en un Hospital Municipal de la Ciudad de Buenos Aires, fue insuficiente en cuanto al número de factores de riesgo estudiados, pues asoció el IMA sólo con la edad, el sexo y el tabaquismo (43).
En el año 1991 comenzó a desarrollarse en países de América del Sur -Venezuela, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile, Brasil, Paraguay, Uruguay y Argentina- una investigación epidemiológica, con un diseño caso-control, con el propósito de estudiar los factores de riesgo para infarto agudo de miocardio (Estudio FRICAS: factores de riesgo coronario en América del Sur), que constituye uno de los más representativos sobre factores de riesgo y cardiopatía isquémica del continente americano.