u popularidad
se ha incrementado en proporción a las alabanzas, siempre que sea "moderado" su
consumo. Los
antiguos chinos consideraban la soja un alimento sagrado y
atribuían su descubrimiento al emperador Sheng-Nung, el
inventor de la agricultura y la medicina. Muchos años después,
la biología ha dado la razón a la sabiduría china y ha
demostrado que esta planta, del mismo grupo que la judía o el
guisante, es una "bomba" de proteína vegetal (un 36 por
ciento), que contiene grasas de tipo insaturado
(cardiosaludables) además de vitaminas del grupo B y
minerales. La soja tiene "una condición única" en el
reino vegetal porque "contiene proteínas de alto valor
biológico casi equivalentes a las de la carne, el pescado o
los huevos". Pero es la presencia
de fitoestrógenos QUE "se
acoplan a nuestros receptores hormonales y son muy
beneficiosos para aplacar algunos síntomas de la menopausia
como los sofocos o el acaloramiento súbito". Sin embargo, esta especialista
destacó que, "como en todos los alimentos, su ingesta excesiva
puede causar problemas. Hemos incorporado a nuestra dieta un
producto de otra cultura y es positivo, pero hay que
consumirlo con moderación". Pero actualmente no
hace falta ser un vegetariano convencido -la soja es
imprescindible en su dieta-, ni un obsesionado con la
alimentación para tomar preparados elaborados con esta planta
-leche o salsas- o brotes de soja (los más pacientes pueden
conseguirlos cultivando las semillas en un cuenco con agua
durante cuatro o cinco días). No obstante, a veces las
apariencias engañan, y la leche de soja, uno de los productos
más comunes, "no es una buena fuente de soja" porque presenta
una concentración baja de proteína, según la doctora Gómez
Candela, que recomienda la soja seca. Entre las
variantes más "exóticas" figuran el "tofu" o queso vegetal (un
extracto elaborado a partir de la leche de soja cuajada y
escurrida que puede servirse estofado o hervido como plato
principal o ingrediente para ensaladas), el miso (pasta de
soja fermentada o con cereales), y el tamari (salsa de soja
fermentada con agua y sal).